#7

 Yo resigo las huellas hacia atrás,

en el afán de caer entre tus garras, me hundo

en las ramas rotas y el follaje pisado,

en tu aroma asomado por mis fosas.


Estoy armando un ariete que no rompe puertas,

volviendo a casa por caminos infinitos.

Dando vueltas, desnudo, en tu cama y en tu cuerpo,

en tu vagina entreabierta y útero receptor.


Lloveré sobre mojado

con el cuello erguido y la mirada derretida.

Porque no me aguanto.


No me aguanto de tu espalda igual que un tigre,

de romper los átomos que separan nuestra piel

e invocar el oleaje de tu placer.

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